jueves, 11 de abril de 2013

¿Fumata blanca o fumata negra?



Hemos elegido el siguiente artículo porque en el se refleja el cambio de tendencia que se está produciendo en la actualidad en el transporte de mercancías. La introducción del uso de gas natural en las locomotoras no es un invento totalmente reciente, puesto que los primeros experimentos datan de hace más de treinta años, la actual situación económica, los avances en su uso en larga distancia hacen ya posible su uso, aunque habrá que cambiar aspectos y regular la normativa para que se pueda emplear.

Por un lado, con la cada vez mayor importancia de la opinión pública en todos los aspectos industriales y de comercio, se ha convertido en un valor añadido que las empresas puedan apostar por un abastecimiento energético lo más limpio y poco contaminante posible.

Además de las ventajas de la propia propaganda del uso de un combustible más limpio, con menor efecto invernadero y en resumen, menos contaminante que los tradicionales, el uso de Gas Licuado tiene la ventaja añadida de un menor coste de producción y transporte.
El incremento que desde los últimos años está experimentando el precio del barril de petróleo está obligando a la búsqueda de nuevos métodos de producción energética, huyendo sobre todo del uso masivo de los derivados del petróleo. En la actualidad se está incrementando la extracción de gas natural, mucho más barata y con una menor dependencia del exterior. Esta misma semana, en el Parlamento de Cataluña, se ha aprobado continuar con el uso del fracking, una técnica consistente en inyectar agua a presión en el subsuelo, para conseguir abaratar los costes de producción del gas natural.



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